

Xalapa, Ver. - Colectivos ciudadanos entregaron más de 11 mil firmas a autoridades estatales para impedir la construcción de un espacio de culto vinculado a la violencia y la descomposición social. /
Irineo Pérez Melo | Xalapa, Ver. | 07 Oct 2025
Representantes de organizaciones civiles y religiosas de Veracruz solicitaron este martes a la Dirección General de Asuntos Religiosos del estado y a autoridades federales que no autoricen la apertura de un templo satánico y de culto a la Santa Muerte en el municipio de Boca del Río, por considerar que su operación atenta contra la paz, la moral y la convivencia comunitaria.
El anuncio fue hecho por Elisa Bonilla, directora de Campaña de Citizen Go en México, quien explicó que la petición busca proteger los valores sociales y prevenir riesgos asociados a prácticas que, según los colectivos, podrían estar vinculadas al crimen organizado y a la violencia. La acción se acompañó de representantes de agrupaciones como Frente Nacional por la Familia-Xalapa, Misión Rescate México, Unión Nacional de Padres de Familia, Alianza de Maestros A.C., Consejo Cívico Ciudadanía y Consejo Veracruzano de Laicos A.C.
Los colectivos entregaron un total de 11 mil 330 firmas de ciudadanos que se oponen a la apertura del templo, superando la meta inicial de diez mil. En un comunicado, señalaron que la libertad religiosa no debe emplearse como pretexto para legitimar cultos que exalten la muerte o promuevan la violencia, y que Veracruz requiere espacios que fortalezcan la esperanza y la cohesión familiar, no lugares que difundan miedo o desprecio por la vida.
De acuerdo con los manifestantes, un “obispo negro” promueve la construcción de este templo, cuya ubicación exacta aún no se ha dado a conocer. La preocupación central es que su presencia podría generar un riesgo para la seguridad y la convivencia social, más allá de un acto de fe.
Finalmente, las organizaciones enfatizaron que su postura no constituye intolerancia religiosa, sino un esfuerzo por proteger los valores fundamentales de la vida y la dignidad humana, elementos que, aseguraron, son pilares de la sociedad veracruzana y de la Constitución.