

Xalapa, Ver. - Ana Rosa Valdés (Veracruz Nos Une) cuestiona la atención a productores afectados por inundaciones, el seguro catastrófico y la falta de programas específicos para nuevos cultivos; Sedarpa responde con cifras de apoyos y limitaciones sanitarias para el aguacate /
Redacción Bitácoras Políticas | Xalapa, Ver. | 26 Nov 2025
En la comparecencia del titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpa), Rodrigo Calderón Salas, ante la Comisión de Desarrollo Agropecuario, Rural y Forestal del Congreso de Veracruz, la diputada Ana Rosa Valdés Salazar, del grupo legislativo mixto Veracruz Nos Une, exigió un plan emergente para los productores del norte afectados por los recientes fenómenos meteorológicos y reclamó la ausencia de programas específicos para los sectores aguacatero y chayotero. El funcionario respondió con un diagnóstico de daños, montos de inversión y acciones de sanidad e infraestructura que, afirmó, ya están en marcha.
La comparecencia se realizó a partir de las 10:06 horas en el recinto legislativo, encabezada por la diputada Dulce María Hernández Tepole, presidenta de la comisión, junto con la legisladora Guadalupe Vázquez González y el diputado Juan Tress Zilli. En ese marco, Valdés planteó sus cuestionamientos en dos rondas de preguntas y, en su mensaje de conclusión, reconoció la experiencia del secretario, pero advirtió que retrasos en obras de caminos saca cosechas y decisiones de otras dependencias condicionan el impacto real de los programas en el campo veracruzano.
En su primera intervención, la diputada centró sus preguntas en la emergencia que vive la zona norte del estado, particularmente el sector citrícola de Álamo. Pidió a Sedarpa informar cuántos productores resultaron afectados, si existe un padrón confiable y actualizado de personas damnificadas y cuál fue el funcionamiento real del seguro catastrófico durante esta contingencia.
Valdés preguntó si hubo activación de pagos por daños o compensaciones para quienes perdieron cosechas, viviendas y parcelas “de años”, y reclamó que además muchos caminos quedaron destruidos, lo que impide trasladar la producción. También refirió reportes sobre afectaciones a pozos de agua y posibles derrames vinculados con instalaciones de Petróleos Mexicanos, y pidió explicar qué acciones se realizarán para garantizar el abasto y la calidad del agua en las comunidades.
La legisladora solicitó detalles sobre el programa de ollas de captación de agua: dónde se construyeron, si existen obras de este tipo en el norte y en qué condiciones se encuentran tras las inundaciones. Advirtió, además, que la situación con la planta jugera de Jumex podría derivar en una crisis económica regional si no se atiende de manera integral la cadena productiva de la naranja.
Otro eje de sus cuestionamientos fue la situación de los precios de garantía para maíz y sorgo. Valdés recordó que en el país se desarrollan movilizaciones de productores por la caída de precios y los costos de producción, y subrayó que Veracruz forma parte de esa inconformidad.
En ese contexto, preguntó cuál es la participación de Sedarpa para acompañar la demanda de mejores precios e ingresos para los agricultores, y de qué manera la dependencia está coordinándose con el gobierno federal para atender los reclamos en torno al agua, la inseguridad y la comercialización de granos básicos.
En la primera ronda de respuestas, Calderón expuso que, tras los fenómenos meteorológicos de octubre, Sedarpa levantó un padrón en campo con 54 técnicos de escuelas campesinas, identificando al menos 4,200 productores afectados en seis municipios de la sierra de Huayacocotla y alrededor de 5,000 en nueve municipios de la zona citrícola de Álamo, con más de 7,000 hectáreas de cultivo dañadas.
El secretario explicó que, por instrucción de la gobernadora Rocío Nahle García, se optó por apoyos directos en lugar del seguro agrícola catastrófico. Señaló que entre 2018 y 2023 el estado pagó 208 millones de pesos en primas y recibió 92 millones en indemnizaciones, lo que representó una recuperación de 44 por ciento, con pagos de alrededor de mil 500 pesos por hectárea, montos que consideró insuficientes para la reconstrucción productiva.
Como alternativa, informó que se destinarán aproximadamente 73 millones de pesos para la zona afectada, con apoyos directos promedio de 7,500 pesos por productor para más de 9,700 beneficiarios. Detalló la entrega de 17 mil 502 bultos de maíz para consumo y siembra, 200 mil plantas de cultivos estratégicos —en particular naranja Valencia—, 3 mil 804 equipos agrícolas menores, 36 mil litros de biofertilizantes, 160 kilos de fertilizante granulado y la instalación de 100 huertos de hortalizas de autoconsumo, principalmente para grupos de mujeres.
Calderón añadió que se otorgarán paquetes de gallinas ponedoras, equipos para rehabilitación de lanchas, alevines de tilapia y alimento para peces, con el objetivo de recuperar la producción acuícola y pesquera en localidades donde los productores perdieron sus estanques.
En la segunda ronda, Ana Rosa Valdés se enfocó en los productores de aguacate y chayote. Recordó que ambos sectores se han reunido con legisladores en el Congreso y han presentado iniciativas ante la misma comisión que recibió la comparecencia, buscando mejores condiciones para la comercialización y el reconocimiento del origen veracruzano de sus productos.
La diputada señaló que, actualmente, los aguacateros locales solo pueden etiquetar su producción, mientras que la exportación es aprovechada por empresas y empacadoras de entidades como Michoacán y Jalisco. Preguntó por qué Sedarpa no ha instrumentado un programa específico para este cultivo y qué incentivos y esquemas de tecnificación se han diseñado para respaldar a este sector, al que consideró con alto potencial de crecimiento para el estado.
En el caso de los productores de chayote, planteó un diagnóstico similar: alta demanda externa, iniciativas en curso y una percepción de falta de acompañamiento institucional. Valdés propuso que la secretaría trabaje de manera coordinada con las comisiones legislativas para destrabar las propuestas presentadas y construir, junto con los propios productores, una ruta de fortalecimiento productivo y comercial.
“Pareciera que el gobierno del estado no está interesado en respaldar a estos sectores, pese a que han tocado muchas puertas”, advirtió, al tiempo que pidió una respuesta clara sobre si existe una estrategia definida para estas ramas productivas.
En sus respuestas, Calderón reconoció la relevancia del cultivo de aguacate, que estimó en alrededor de 12 mil hectáreas, principalmente en las regiones de Huatusco y Xalapa. Sin embargo, explicó que Veracruz mantiene un estatus fitosanitario negativo debido a la presencia del gusano barrenador de rama y semilla, lo que impide la comercialización formal del fruto fuera del estado.
Indicó que Sedarpa cuenta con cuatro técnicos especializados que brindan asesoría en manejo integral de huertos, con el objetivo de avanzar hacia la certificación de “huertos temporalmente libres” de la plaga, condición necesaria para abrir mercados en otras entidades y, eventualmente, en el exterior. Añadió que la dependencia ha vinculado a productores con una nueva planta procesadora de aceite de aguacate instalada este año, que compra fruta de calidad inferior para su industrialización.
El funcionario también advirtió que el crecimiento desordenado del aguacate puede incentivar la tala de bosques y el desplazamiento de cafetales, por lo que, dijo, la política de la secretaría es apoyar al sector sin promover la deforestación.
Respecto al chayote, Calderón señaló que el cultivo ya exporta y que el reto está en mejorar el manejo sanitario y la capacitación técnica; planteó que la asesoría de las escuelas campesinas busca reducir pérdidas y fortalecer la competitividad de los productores.
En su mensaje final, Ana Rosa Valdés agradeció las respuestas del secretario y reconoció que su experiencia como ex presidente municipal y su origen veracruzano le dan conocimiento del campo. Sin embargo, advirtió que la ejecución de obras de infraestructura condiciona el éxito de los programas agropecuarios.
Recordó que, en una comparecencia reciente, el titular de la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas informó que sólo llevan 40 por ciento de avance en las obras del año, incluidos caminos saca cosechas que, según Calderón, deberían estar concluidos o en proceso de entrega. La diputada advirtió que estos retrasos impactan directamente en la movilidad de los productos agrícolas y en la economía de las comunidades rurales.
Finalmente, deseó éxito al funcionario y reiteró su disposición a dialogar sobre temas pendientes, como el seguimiento a los aguacateros y chayoteros y la atención integral a los productores del norte. Subrayó que el reto es que los anuncios de inversión y programas se traduzcan en resultados concretos para las mujeres y hombres que sostienen el sector primario en Veracruz.