Redacción Bitácoras Políticas | Xalapa, Ver. | 09 Oct 2025
La falta de suspensión generalizada de clases en Veracruz provocó indignación y críticas en redes sociales y comunidades educativas, luego de que el Gobierno estatal determinara mantener actividades escolares en la mayoría de los municipios, pese a las inundaciones, deslaves y cortes de energía ocasionados por las intensas lluvias de los últimos días.
La Secretaría de Protección Civil informó que la medida de suspensión sólo aplicaría en 38 municipios del norte del estado, los más afectados por el desbordamiento de ríos y arroyos. Sin embargo, en el resto de la entidad, las clases se desarrollaron con normalidad, lo que generó preocupación y reclamos de maestros y padres de familia en regiones donde las condiciones meteorológicas también representan riesgo para el traslado y seguridad de los estudiantes.
En municipios como Poza Rica Xalapa, Misantla, San Andrés Tuxtla y Córdoba, usuarios denunciaron a través de redes sociales que las lluvias constantes, los derrumbes en carreteras y la falta de transporte público dificultaron la asistencia a planteles. “No se trata de faltar por gusto, sino de proteger a nuestros hijos; muchas escuelas están sin energía eléctrica y con filtraciones de agua”, escribió una madre de familia en Poza Rica.
La Coordinación Nacional de Protección Civil reportó que más de 120 municipios presentan afectaciones, ya sea por inundaciones, deslaves o anegamientos. En zonas rurales, comunidades permanecen incomunicadas por el colapso de caminos y el aumento en el caudal de ríos como el Actopan, Tuxpan y Papaloapan.
Organizaciones magisteriales y colectivos ciudadanos solicitaron a la gobernadora Rocío Nahle García reconsiderar la medida y decretar la suspensión de clases en todo el estado hasta que mejoren las condiciones climáticas y se garantice la seguridad en los traslados escolares. “No se puede exponer a niños y docentes cuando la mitad del territorio está bajo lluvia continua”, expresó un representante sindical.
La mandataria estatal señaló que el Gobierno mantiene la vigilancia y coordinación interinstitucional a través de los planes Tajín, DN-III-E y GN-A, y que las decisiones sobre suspensión de actividades se toman con base en reportes técnicos de Protección Civil y la SEV, priorizando la integridad de la población escolar.
Mientras tanto, autoridades educativas reiteraron el llamado a directores y supervisores escolares para evaluar de manera local las condiciones de acceso y seguridad de cada plantel, con la posibilidad de suspender clases si el entorno lo amerita.
Sin embargo, la falta de una disposición uniforme ha alimentado la incertidumbre y el malestar social, especialmente en regiones donde las lluvias siguen sin dar tregua y las afectaciones se multiplican.
