Ciudad de México - Confirman primer caso de gusano barrenador en Nuevo León; autoridades refuerzan vigilancia sanitaria /

Redacción Bitácoras Políticas | Ciudad de México | 23 Sep 2025

El gobierno de México alcanzó un acuerdo con Estados Unidos para impedir que el país vecino cierre de manera unilateral la frontera a la exportación de ganado, luego de confirmarse el primer caso de gusano barrenador en el municipio de Sabinas Hidalgo, Nuevo León, a unos 100 kilómetros del límite binacional. La presidenta Claudia Sheinbaum informó que la medida busca dar certidumbre a los productores y garantizar el flujo comercial bajo protocolos sanitarios compartidos.

El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) confirmó que el ejemplar infectado provenía de Veracruz y fue atendido de inmediato: se eliminó la larva en fase 2 y se curó la herida del animal, evitando complicaciones. Las autoridades estatales mantienen alerta sanitaria para reforzar la vigilancia en los puntos de inspección y prevenir nuevos brotes.

De acuerdo con Noel Ramírez Mejía, presidente de la Unión Ganadera Regional de Nuevo León (UGRNL), la pronta detección permitió evitar que el parásito avanzara a fase 3, etapa en la que la larva cae al suelo y da origen a la mosca adulta, lo que hubiera incrementado el riesgo de dispersión. “Exhortamos a las autoridades federales y estatales a fortalecer la supervisión en cada caseta de inspección y a los productores a reportar de inmediato cualquier herida sospechosa en el ganado”, señaló.

La UGRNL informó que ha capacitado a miles de ganaderos para identificar signos de la plaga y aplicar medidas sanitarias oportunas. Actualmente más de 13 mil productores se mantienen en alerta, con el compromiso de proteger la sanidad del hato ganadero y el futuro de la actividad en la entidad.

En tanto, especialistas del Instituto de Ciencias Veterinarias advirtieron que el gusano barrenador representa una de las amenazas más graves para la ganadería en América, pues su rápida propagación puede afectar tanto la salud animal como la economía del sector. México y Estados Unidos acordaron mantener una coordinación estrecha a través de sus agencias sanitarias para contener la presencia del parásito y evitar afectaciones al comercio binacional.

El gobierno federal adelantó que se intensificarán las campañas de monitoreo y control en la frontera norte y en los estados con mayor actividad pecuaria, con el fin de asegurar la calidad e inocuidad del ganado mexicano en los mercados internacionales.