Redacción Bitácoras Políticas | Ciudad de México | 25 Jul 2025
Una manifestación pacífica de trabajadores del sector salud en la Ciudad de México fue disuelta de forma violenta por elementos de la policía capitalina, dejando al menos una enfermera herida, según denunciaron testigos y personal médico. El personal del IMSS-Bienestar, que incluye médicos, enfermeras y técnicos, se había congregado para exigir el suministro de medicamentos, reparación de equipos médicos y el pago de salarios pendientes desde hace varios meses.
El operativo de desalojo ocurrió mientras los manifestantes solicitaban diálogo con autoridades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS-Bienestar), sin que se les ofreciera una respuesta institucional. Las protestas se han replicado en otras entidades como Oaxaca, donde se reportaron acciones similares. Los trabajadores aseguran que la crisis sanitaria acumulada en los últimos siete años, especialmente por el desabasto de medicamentos, ha provocado el deterioro progresivo del sistema de salud pública.
Durante la intervención policiaca en la capital del país, varios manifestantes reportaron empujones, agresiones físicas y uso excesivo de la fuerza. Videos difundidos en redes sociales muestran a personal de salud, incluidos adultos mayores y mujeres, siendo replegados por uniformados con escudos y toletes. “No estamos pidiendo privilegios, sino condiciones dignas para atender a la población”, declaró un médico participante que solicitó anonimato por temor a represalias.
El incidente ha generado indignación en colectivos ciudadanos y gremios médicos, quienes recordaron que durante la pandemia de COVID-19 el personal médico fue considerado héroe nacional. “Hoy, en vez de respeto, reciben golpes”, señalaron representantes de asociaciones de profesionales de la salud.
La situación se agrava por la falta sostenida de recursos en hospitales públicos. Según testimonios recabados en diversas regiones del país, el personal enfrenta condiciones precarias debido al rezago en el mantenimiento de equipo médico, la escasez de insumos básicos y la suspensión de pagos. Esta combinación, denuncian, pone en riesgo tanto a trabajadores como a pacientes.
Roberto Canseco, vocero de agrupaciones médicas inconformes, declaró que las protestas continuarán en todo el país hasta que se atiendan las demandas, e hizo un llamado al gobierno federal a dejar de ignorar “el clamor legítimo de quienes sostienen el sistema de salud con trabajo y sacrificio”.
