

Xalapa, Ver. - El periodista especializado en crimen organizado advierte en Xalapa que el pacto entre delincuencia y poder político coloca a comunicadores en un escenario de alto riesgo /
Redacción Bitácoras Políticas | Xalapa, Ver. | 18 Jun 2025
La creciente violencia en México, sumada a los vínculos entre políticos y crimen organizado, ha generado una situación crítica para la libertad de expresión y propiciado que numerosos periodistas recurran a la autocensura como mecanismo de protección. Así lo advirtió el periodista Ricardo Ravelo, durante una entrevista concedida en su visita a la capital veracruzana.
Ravelo, reconocido por su labor en el periodismo de investigación y su trayectoria como corresponsal de Proceso, subrayó que los comunicadores quedan atrapados entre intereses criminales y políticos, sin una respuesta efectiva del Estado que garantice su seguridad. “Lo que estamos viviendo es un escenario de alto riesgo para ejercer el periodismo y, particularmente, el periodismo crítico”, sostuvo.
El reportero, autor de diversos libros sobre delincuencia organizada, recordó que el periodo de mayor letalidad para el gremio se vivió durante el sexenio de Javier Duarte de Ochoa en Veracruz. Aquella etapa, marcada por asesinatos de periodistas y represión directa, dejó huellas profundas en la práctica informativa del estado. “Desde entonces, muchos colegas dejaron de abordar ciertos temas por miedo, y eso sigue ocurriendo”, afirmó.
Aunque la violencia contra periodistas se intensificó desde el gobierno federal de Felipe Calderón, en Veracruz tuvo un epicentro particularmente grave bajo la administración duartista. Según Ravelo, la impunidad, la corrupción institucional y la colusión entre autoridades y crimen han deteriorado las condiciones para informar con libertad y seguridad.
En ese contexto, la autocensura se ha vuelto una medida de sobrevivencia. “Muchos han optado por guardar silencio, por no tocar ciertos temas. Lo hacen para proteger su vida y la de sus familias. Eso habla del nivel de vulnerabilidad en el que vivimos”, expresó.
El periodista lamentó también que el Estado no ofrezca garantías reales ni políticas eficaces para contrarrestar este clima de hostilidad. A su juicio, la falta de respuesta institucional frente a las confrontaciones criminales y la infiltración política del narcotráfico ahonda la crisis de derechos humanos y socava los principios democráticos.
“La situación no sólo se ha agravado, sino que va a seguir empeorando si no hay voluntad política para enfrentar a los grupos delictivos y desmantelar sus redes de poder”, concluyó Ravelo.