21 de Diciembre de 2025
 
21 de Diciembre de 2025
 
El día en que se irá Zepeta y expulsarán a Huerta
Víctor Murguía Velasco
Análisis

30 Jun 2025

Vía los partidos políticos es como supuestamente se hace la democracia, pero en México son muy antidemocráticos.


Cuando están de oposición se la pasan exigiendo democracia y cuando están en el poder se la pasan presumiéndola, pero la verdad es que a su interior esa forma de gobierno no se practica.


Aún estaba en su apogeo el PRI y en una de las tantas veces que un gobernador puso a un incondicional suyo sin gran mérito en la dirigencia estatal priista, hubo quienes cuestionaron la decisión y preguntaban cómo es que se había decidido así.


En reunión de exdirigentes priistas y de otros militantes distinguidos, uno de ellos, con larga carrera, respondió a ese cuestionamiento: pues llegó a la dirigencia igual que tú o yo, por decisión del gobernador en turno.


Gonzalo Morgado fue puesto en la presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI, a sus 25 años, por el gobernador Rafael Hernández Ochoa; por sus méritos se sostuvo seis años.


El gobernador Agustín Acosta Lagunes puso en la dirigencia, primero, a Edmundo Martínez Zaleta, luego a Yayo Gutiérrez y después, desde la Ciudad de México, le impusieron a Dante Delgado Rannauro.


Fernando Gutiérrez Barrios quiso que el PRI, en su campaña, fuera dirigido por Fernando Córdoba Lobo y después colocó a Jorge Uscanga.


Los últimos gobernadores priistas, Fidel Herrera y Javier Duarte, hicieron lo mismo con el PRI y por eso despacharon como dirigentes Ranulfo Márquez, Ricardo Landa, Jorge Carvallo, Érick Lagos, Elízabeth Morales y Alberto Silva.


Dante, después de ser priista y ya como dueño de Movimiento Ciudadano (antes Convergencia por la Democracia) ha puesto a todos los dirigentes estatales de MC y también a los nacionales.


El Partido Verde en Veracruz y su dirigente Édgar Herrera responden a los intereses del secretario de Organización nacional del PVEM, Javier Herrera Borunda.


En el PAN a veces intentan ser democráticos, pero para empezar aquí en Veracruz depende de cacicazgos regionales y hemos visto que cómo algunas familias se heredan los cargos públicos y que al final son los mismos los que imponen a regidores y diputados.


Así está hoy Morena en Veracruz y en todo el país. Por eso, localmente, quien decide quién dirige Morena o quién sale de la dirigencia es la gobernadora Rocío Nahle.


Morena es un partido tan o más vertical que el PRI. En Veracruz ha tenido dos dirigentes: Manuel Huerta, puesto por Andrés Manuel López Obrador, y Esteban Ramírez Zepeta, impuesto por Cuitláhuac García y ahora sostenido por Rocío Nahle.


¿Cuándo se irá Zepeta de la dirigencia?, pues cuando lo decida Nahle o cuando las circunstancias políticas lo dicten, o sea, si la dirigencia nacional -Andrés López Beltrán- le gana esa partida a la Gobernadora.


¿Y expulsarán de Morena al senador Manuel Huerta, el principal crítico de Cuitláhuac, Zepeta y Nahle? Eso tampoco sucederá. La dirigencia estatal lo puede plantear -ahora de traidor no lo bajan- pero la decisión final está en los organismos del comité nacional de Morena y ahí no ven nada bien a Nahle.


Así las cosas, ¿cuándo crees, estimado lector, que haya realmente democracia en México si en los partidos la repelen porque no les conviene?